[Análisis] BenQ PD3200U: Hecho Por y Para Profesionales

Por muchos es bien sabido que los diseñadores gráficos actuales requieren de monitores con características que no encontramos en los modelos convencionales, con la finalidad de llevar a la realidad proyectos creativos fidedignos, principalmente en lo que a fidelidad de colores se refiere.

Una vez dicho lo anterior, en este análisis/review/reseña del BenQ PD3200U nos centramos en un flamante monitor 4K de 32’’, del cual destacamos no solo su imbatible relación precio-calidad, sino también las excelentes impresiones de sus compradores recientes.

En este apartado, BenQ se ciñe a la fórmula de otros modelos de la serie, conservando ese discreto y robusto chasis negro mate con bisel de grosor medio, soportado por una peana central rectangular con un pequeño agujero para mantener los cables conectados ordenados.

Su mayor ventaja, con diferencia, reside en la posibilidad de ajustar la pantalla según cada necesidad. Específicamente, puedes regular la altura (hasta 150 mm), la inclinación (de -5º a 20º), el giro (45º hacia la derecha e izquierda) y la orientación, pudiendo colocarla en posición horizontal o vertical.

Opcionalmente, puedes anclarlo en la pared y así ahorrar más espacio, haciendo uso de un soporte de tipo VESA compatible con medidas de 100 x 100 mm.

Nada más echar un vistazo a las primeras impresiones de los usuarios, corroboramos el increíble rendimiento del BenQ PD3200U bajo tareas gráficas de lo más diversas, incluyendo diseño gráfico, animación 3D, ilustraciones y edición de contenidos multimedia.

Lo anterior es posible gracias a su acertada apuesta por un panel LED antirreflejos de 32 pulgadas, cuya resolución 4K y tecnología IPS te permiten trabajar en tus proyectos, pudiendo apreciar cada detalle en pantalla desde prácticamente cualquier ángulo.

Por su parte, vale destacar que la colorimetría de este panel no tiene nada que envidiar a la de otros modelos más costosos, ya que no solo es capaz de reproducir el 100% de los espacios de color, sRGB y Rec.709, sino que también cuenta con una profundidad de color de 10 bits reales y certificación Pantone de fábrica.

Otra función útil para tu productividad, reside en las 4 modalidades de uso integradas: el modo Darkroom para trabajar en espacios oscuros, el modo Animación para mejorar el brillo solo en las zonas más oscuras, el modo CAD/CAM con especial énfasis en líneas, texturas y formas, y el modo DualView para visualizar una misma imagen de dos formas diferentes al mismo tiempo.

Por último, y no por ello menos importante, mencionar la inclusión de un filtro anti luz azul, el cual te previene de sufrir cansancio ocular durante esas largas sesiones de trabajo; así como las conocidas funciones PIP y PBP, para que puedas dividir la pantalla y trabajar como mejor te venga.

Si bien no se trata de un monitor propiamente gaming, lo cierto es que sus excelentes prestaciones lo perfilan como una opción nada despreciable, si solo sueles jugar ocasionalmente títulos no muy exigentes en términos de tasa de refresco.

Con todo, vale recordar que la frecuencia de actualización de este monitor se mantiene en unos aceptables 60 Hz y el tiempo de respuesta en 4 ms (GtG); contando a su vez con tecnología Flicker-Free para evitar incómodos parpadeos durante el uso.

Y para gozar de un entretenimiento placentero a la hora de ver películas y series, este modelo se beneficia de una relación de aspecto panorámico de 16:9, un nivel de brillo de 250 nits, una pareja de altavoces de aceptable desempeño y un tamaño más que razonable para sumergirte en tus contenidos favoritos.

En definitiva, el BenQ PD3200U es de las soluciones más recomendadas del mercado, siempre que tu objetivo sea llevar tus creaciones gráficas al siguiente nivel, tanto si te inicias en este mundillo o no, y sin tener que derrochar una fortuna para conseguirlo.

Y es que, por este precio, es difícil encontrar otro modelo tan versátil a nivel de diseño, realista en cuanto a calidad de imagen y colorimetría y solvente en lo que respecta a soluciones de conectividad; extendiendo su uso hacia el entretenimiento multimedia doméstico, si así lo deseas.

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